Creo que, aunque está bien, no basta con que el CEO de una mediana o gran empresa entregue dinero o servicios gratuitos a la sociedad en tiempos de crisis.
Los más escépticos tenderemos a preguntarnos cuál es el beneficio oculto de esa decisión para el CEO o la Compañía. Al margen del marketing social que es una realidad en todos los casos y por qué no, estaremos pensando que quizás hay otros intereses. «Vale, el CEO se baja el sueldo base pero es posible que haya aumentado sus bonus».
Esto no sólo lo puedo pensar yo, sino una buena parte de los empleados. Es posible que esos valores de generosidad y responsabilidad social que tanto aumentan la estima que sentimos por nuestros líderes, no acabe de ser creíble, sobre todo si no se corresponde con otros momentos en que más bien ha demostrado lo contrario.
En el caso de Johnson &Johnson que ha invertido mucho dinero en el desarrollo de una vacuna para el COVID-19, su CEO hizo bien en puntualizar que su propósito no era obtener beneficios cara a sus empleados y a la sociedad. Ha añadido una dosis de transparencia que, si no se demuestra lo contrario, incrementará la estima de los empleados hacia Alex Gorsky y por tanto, su liderazgo positivo.
Es indispensable explicar claramente de qué manera esas donaciones son o van a ser utilizadas.
Tenemos un caso excepcional porque proviene del sector de la política: Jacinda Arden, Primera Ministra de Nueva Zelanda, ha anunciado en rueda de prensa que tanto ella como sus ministros y jefes ejecutivos se bajaban el sueldo un 20% durante 6 meses. Esto sí que es una prueba de liderazgo por muchas razones.
En primer lugar obtener una mayorá de «síes» por parte de todos esos políticos y altos funcionarios llevarlo a cabo. No habrá sido a punta de pistola. Pese a los poquísimos muertos que tiene el país. Ella constata que muchos neozelandes@s han perdido su empleo y están teniendo dificultades. Se entiende que va a utilizar ese dinero en ayudarles.
Es obvio que gracias a ese acto de solidaridad tan poco usual en los políticos, su imagen quedará reforzada para la mayoría de neozelandes@s. Además de conseguir algo muy característico de los líderes de verdad. convertirse en referente para los ciudadanos del mundo, ser un precedente que la política no podrá obviar aunque no haya salido en nuestras teles, subir el standard de ética, hacer algo nuevo para solucionar problemas de la gente.
Bravo Jacinda